28 agosto 2012

Dulce rutina

Me gustaba mi rutina,
ya me había hecho a ella,
a despertar entre tus brazos
desayunar tus besos
y comer con caricias..

El aburrimiento ,
no estaba en mi menú del día
y no dejaba que estuviese en el tuyo.

La sed no se quitaba
y necesitaba de tí
hora tras hora..

El hambre de tenerte aumentaba
y la desesperación de perderte...
también.

Largas noches sin tocarte
oliéndote a mi lado
y alargando mi sombra
para rozar tu cuerpo
sin que lo notases .

Agonizando...
Esperando...
Desintoxicándome de tí
para sufrir lo menos posible.


Llorando en silencio
y derramando gota a gota
mis rutinas sin tí.





Otra Piel

Sólo me enamoré una vez
hasta dejarme la piel
y después de recoger las tiras,
esparcidas por cada rincón
con tintes del ocre de una vela,
la silueta que dibujaba mi espejo
gritaba desaparecer.

Miles de puntos de sutura
impedían el olvido
y las venas palpitaban
queriendo buscar salida
fuera de ese caos inhumano.

Cristales por el suelo
y la resaca
de sentimientos distorsionados,
envueltos de polvos blancos ,
era lo único que prendía
un hilo de luz en la habitación
y ahora sólo queda despertar,
de nuevo,
con otra PIEL.





08 agosto 2012

- La habitación de Joan -



Cierra la puerta despacito, 
No vaya a ser q apagues 
La vela que ilumina 
la esquina de ésta habitación.
Ponte cómoda 
Que ya es hora de que te quites la ropa, 
Que te desnudes 
De cuerpo para adentro.
Empieza a acariciarme el pelo
Y deja que las palabras fluyan, 
Que nada las pare, 
Ni el imcómodo silencio..
Ponles alas 
y deja que salgan volando,
Que no se detengan hasta llegar a mis oídos 
Y q recorran mi cuerpo sin filtros 
Ni mentiras.
Desnudemos las frases
Destapemos sentimientos
Y revolquemonos con la culpa 
Esa de la que nunca nos hemos arrepentido
Y la que tanto bien nos hizo. 


12 febrero 2012

Un pellizco a la vida..

Hoy, me siento generosa,
hoy, te regalo otra de tantas poesías
olvidadas en el cajón de la mesilla de noche,
allí donde antes la luz tenue era romanticismo,
ahora...
una vela que se apaga.

Hoy, me siento generosa
no serás tú quien pague la última cena,
ni el último corazón roto,
hoy, regalo hilos y retales
de todo los años perdidos.

Hoy, me siento más generosa que nunca
así que prometo pensar en tí
cada vez que tropiece
cada vez que caiga y me levante
porque hoy,
empiezo a ser egoista.