27 septiembre 2006

Mi regalo

Te regalo mi sonrisa,
la que siempre viste mi cara
cuando te veo.
Te regalo mis ojos,
brillan más cuando te miro.
Te regalo mis lunares,
nadie como tú para recorrerlos.
Te regalo mi pelo,
enrédalo a tu antojo.
Te regalo mi cuello
y mordisquéalo cuantas veces quieras.
Te regalo mis manos
para que jueguen con las tuyas.
Te regalo mi cintura,
llévala hacia ti
y haz lo que quieras.
Te regalo todo
porque sin ti no sería nada.

26 septiembre 2006

Dudas absurdas

Sí,
las dudas me invaden
cada vez que oigo su nombre.
Algo me hace tambalearme
Y perder el control de la situación.
Me siento vulnerable,
triste,
engañada,
dolida...
Se rasgan mis entrañas
y brotan lágrimas de dolor irremediablemente.
Tengo miedo
y no entro en razón.
Me vuelvo irracional
Y completamente absurda.
Empiezo a imaginarme situaciones ,
cosas que me duelan,
que me hagan más daño
y me las termino creyendo.
Necesito tu abrazo,
tus besos
Y que me calmes.
Sólo tú sabes como hacerlo.

Tu vuelta

Me invaden las ganas de abrazarte,

de juntarte tanto a mí

que nuestros olores se mezclen.

De besarte,

besarte,

besarte,

besarte,

y no soltarte.

De volver a caminar

enlazando nuestras manos,

cogerte de la cintura,

de apoyar mi cara en tu hombro...

Echo de menos

las conversaciones absurdas,

las horas hablando de nada,

nuestras ganas de cambiar el mundo,

nuestro futuro en común,

tu voz.

Nuestro reencuentro está cerca,

y aquí estoy,

esperándote con las mismas ganas

que el 6 de mayo a las 19,30...

21 septiembre 2006

Insomnio

Mis ojeras ya no se pueden disimular
tras un maquillaje.
Mi cansancio hace mella en mí
y el sueño lo pierdo cada noche
que apareces en mi mente.
No hago otra cosa que pensar historias
historias con un final en el que tus labios y los míos
se encuentran irremediablemente,
tus manos y mi cuerpo se funden,
y sólo nos queda el abrazo desnudo de la una con la otra.
Necesito saciarme de ti,
darte todo eso que me pides con la mirada,
con esa sonrisa irónica.
Necesito tragar saliva,
otra copa me ayudará,
y quizás entonces,
sólo entonces,
quieras invitarme,
después,
a tu casa...

19 septiembre 2006

Todavía no recuerdo cuándo perdí tu olor
y dejé de oír tu voz.
Nuestras citas se espaciaban en día sí, día no.
No sé si fuiste tú quien dejó el último mensaje en mi contestador
o fui yo quien te visitó por última vez.
Dudo sí quizás nunca debí conocerte
o si dejé de hacerlo demasiado temprano.
No sé si te di suficiente
o me quede a medio gas.
Tenía miedo de impregnarme de tu cuerpo
y no olvidarlo tan fácilmente.

¿ Por qué...?

¿ Por qué te he elegido a ti
para que te cueles entre mis sábanas cada noche?
¿ Por qué quiero compartir contigo
el desayuno, la comida y la cena?
¿ Por qué te cedo mi parte del sofá para que te tumbes
y acaricio tus pies sin parar?
¿ Por qué sales ganando, sin sorteos,
el mando de la tele?
¿ Por qué eres capaz de dibujarme
la mayor de las sonrisas?
¿ Por qué cojeo cuando no estás?
Sólo tú eres la respuesta
Y me encanta ser tu pregunta.

18 septiembre 2006

Reflexión

En este Blog , saco las cosas malas que tengo dentro
porque las buenas las guardo para mí.

17 septiembre 2006

Solamente una vez...

Solamente una vez,
ni dos ni tres,
se pararon mis pies.
Solamente una vez
te perdí.
Solamente una vez
Me enamoré del lado oscuro.
Solamente una vez
Te seguí.
Solamente una vez
Dejé de soñar para estar
despierta a tu lado.

Despedida

No podía resistir las lágrimas
viéndote detrás de aquel cristal,
teniéndote a menos de 5 milímetros
y el frío de no tener tu cuerpo cerca del mío.
La tristeza iba ganando sitio
Y la felicidad arrancaba encima de cuatro ruedas.
El semáforo me dio tregua,
Corrí y pude volver a dibujarte en mi retina.
Y ahora aquí estoy,
Vacía sin ti,
Dejando que el reloj siga jugando conmigo a su antojo
Y esperando tu reencuentro.

15 septiembre 2006

....

Regálame tu espalda
Y haré que cada caricia sea como un tatuaje permanente.
Insísteme en que recorra tus pechos
Y disfrutar haciéndolos míos.
Invítame a visitar tus labios
Y permíteme navegar por un mar de sabores.
Dame una tregua entre tus piernas
Y déjame deslizarme por ellas sin tu consentimiento
Quiero llegar al éxtasis en tu compañía,
¿…me invitas...?

06 septiembre 2006

algun día

Solía pensar que estabas tranquila
sabiendo que no tenías de qué preocuparte,
a la salida te esperaban
y no tenías ninguna duda de que allí estaría.
Yo te envidiaba por ello,
a mí no me ibas a esperar en ningún sitio
que no fuese en mis sueños…
Me imaginaba llegando a casa,
esta vez la sopa no estaba fría,
ni la sartén echando humo sin parar
por culpa de mis ausencias pensando en tí.
Hacía la cama imaginando que a la noche
o incluso a media tarde,
la íbamos a deshacer sumidas en la pasión.
Y aquí sigo,
Envidiando a todo aquel que no espera
porque saben que estarán.

...

Hazlo

otra vez,

enreda la mentira

y conviértela en verdad.

Vuelve a decir

que le quieres

y atácale por detrás.

Hazle feliz

pero incapaz de sonreír.

Suéltale

pero sin aflojar sus ataduras.

Deja que sangre

pero sin que llegue a derramar ni gota.