27 noviembre 2006

algo cotidiano

Dibujando tu cintura,
me quedé dormida.
Mirando al suelo,
me tropecé con el asfalto.
Cantando una canción,
tartamudee y desentoné.
Soñando despierta,
me caí de la cama.
Caminando de tu mano
me solté y me perdí.
Cuántas cosas pasan
y cuantas nos perdemos...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Este sí que me ha gustado pequeño saltamontes. ¿Qué te parecen mis pequeños cambios en el blog? Ya me lo dirás mañana pero recuerda que tú y yo nunca quedamos jeje.
Muak!