Como cuando eres una niña,
te llevan por primera vez a ver el mar,
te sientan en la orilla con un cubo y una pala,
empiezas a edificar castillos,
puentes, casas...
Y cuando quieres llamar a tus padres
para que vean la octava maravilla,
nadie te ha explicado lo que es la marea,
que sube y baja como el calipo
que te habías pedido de postre en la comida,
y una ola arrasa con todo,
con tu poblado
y con tu ilusión.
Miras al mar
y juras odio eterno,
juras que nada ni nadie
te volverá a destrozar tus sueños.
2 comentarios:
Ya veo que tuviste una mala experiencia con el mar cuando eras pequeña jaja.
Un beso
Eres un poco Scarlett Ohara (o como se escriba)
JURO QUE JAMÁS VOLVERÉ A PASAR HAMBRE!!!
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